7/10/10

el "yo" pequeñito y el "yo" grande

Si me preguntas ¿quién eres?, te contestaría algo así:
"mujer, psicóloga, de tal edad, morena, nacida en.... hablo tal idioma...". Si ampliara mi definición, podría incluir características, más psicológicas, por ejemplo: "soy alegre, paciente, tímida..." y unas cuantas más.
Todo lo que yo soy capaz de nombrar de mí, todas las características con las que me identifico, son lo que podríamos llamar mi "yo pequeño".
El "yo" pequeño es lo que creo que soy.

Si esto que acabo de contar está claro, y si habéis leído el título del post, os haréis más o menos la pregunta siguiente:

Y si esto es el "yo" pequeño, ¿qué es el "yo" grande?

Es todo lo que también soy, o puedo llegar a ser, y todavía no reconozco en mí.


Haced la prueba si no. Coged un folio, bolígrafo, y escribid el título: "Yo soy..."
Ahora, terminad esta frase tantas veces como podáis. Yo soy...alegre, yo soy...tímida, yo soy... responsable....
Intentad esto hasta que terminéis la hoja, dejad que vengan a vosotros las palabras que os describan.

Todo lo que habéis escrito en el folio, forma parte del yo pequeño, el que creo que soy. Si no creyera que soy tímida, no lo pondría.

¿Y entonces qué es el "yo" grande? ¿qué tiene que ver con todo esto?

Para mí, el YO GRANDE tiene que ver con lo que aún no conozco de mí, pero ya soy, o lo soy en potencia. Son características con las que no me definiría quizá, pero que también soy, o puedo llegar a ser.  Lo llamamos GRANDE porque abarca mucho más que nuestra corta definición, que cabe casi en un folio o dos.

A veces hay características que creemos que no forman parte de nosotros: "yo soy tímida, así que, no soy atrevida". Como si tuviéramos que elegir entre las dos caras de una misma moneda. Como si las personas no pudiéramos ser más cosas de las que caben en el folio que nos define.
Si creemos que sólo nos pertenece una cara de la moneda (si soy tímida, no soy atrevida), nos perdemos la oportunidad de probar a ser atrevidas, y ver que también lo somos.

Las cualidades con las que no nos identificamos, y las que sí creemos que son nuestras, forman parte del YO GRANDE, todas juntas. Somos mucho más de lo que imaginamos.
Normalmente sólo somos conscientes de una parte de nuestro potencial.

En la psicoterapia tratamos de ampliar nuestro concepto de nosotros mismos. Pasar de tener un concepto de uno mismo rígido, limitado, a saber que somos mucho más...
Porque, ¿siempre me va a servir ser tímida? depende de la situación en la que me encuentre. ¿cuándo puede estar bien para mí ser atrevida? ¿Ya soy atrevida algunas veces? ¿Cuándo, donde, con quién?....

Imagina que tienes un álbum de cromos precioso, con muchas hojas y con tu nombre en la portada. Cada espacio vacío en este álbum es el lugar para una característica que puedes descubrir de ti, que te puede ayudar en la vida, a no estar limitado/a por tu propia definición de ti misma/o.

Si esto te ha interesado, deja tu comentario.
Seguiremos hablando de este tema en más posts.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

El discurso sobre Yo GRANDE y Yo PEQUENO me ha hecho pensar a un problema que estoy tratando, lo de no acceptar la distancia que existe entre lo que uno es y lo que quiere ser, entre el real y el ideal.

Entender no es hacer y tampoco sentir, y todo esto lo entiendo pero no lo hago y no lo siento.

Quiero emanciparme de algunas emociones negativas que no me gustan, pero no lo consigo y esto me da rabia y sobre todo sentimientos de culpabilidad por no lograrlo.
El resultado es tener emociones negativas mas el sentimiento de culpabilidad por hablerlas tenidas... Doctora es grave?!?!?

Cristina Abellán Pérez dijo...

:) No es grave... Es casi lo normal. Lo que pienso de mí y del mundo es lo que genera emociones en mí. Emociones agradables, y otras desagradables. Estar mucho rato al día en el mundo de lo ideal "lo que debería ser, o cómo debería ser yo"... nos lleva a desconectarnos de lo que pasa en el ahora. Cuando volvemos al ahora, el malestar se hace presente también. Por comparar lo que hay con lo que pensamos que debería haber. Digo yo una cosa... Si uno quiere tender hacia algo, ser más cosas, o tener más de una característica... algo que puede hacer es pasar a la acción. Ahí puede que empiece a disolverse el malestar, cuando sabemos que estamos en camino de algo.